domingo, 23 de mayo de 2010

A pesar de ser domingo

Me encanta. Cuando los primeros rayos de sol verdaderos del año se posan en tus brazos, en tu pecho, en tus mejillas, para besarte mejor, con más fuerza, para quedarse contigo. Cuando el olor del sol (porque el sol tiene un olor, el suyo, único para cada objeto y para cada persona), te abraza, y tu cuerpo huele a calor y tu pelo desprende energía. Me encanta. A pesar de los exámenes, de no poder tumbarme durante horas al sol, a pesar de no poder acariciar la arena con los dedos, a pesar de no poder sentir el mar jugar bajo mis pies.


Me encanta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario